Se desconoce si el núcleo
terrestre está perdiendo su campo magnético, que provoque el desencadenamiento
de un fuerte viento solar, favorecedor del barrido de la atmósfera que acabe
provocando el verdadero cambio climático atípico - Alfonso Campuzano
Si, como afirma la NASA, por medio de
Bruce Jakosky en sus trabajos publicados en la revista Science,
el planeta Marte, debido a circunstancias difíciles de evidenciar, tras enfriarse su núcleo, perdió su campo magnético, que provocó el desencadenamiento
de un fuerte viento solar, que favoreció el barrido de su atmósfera y desnudó
su superficie, que acabó provocando el cambio climático atípico, que transformó
un teórico planeta cálido, y cubierto de agua líquida, en un planeta desierto y
frío, tal como se le viene fotografiando desde hace cuarenta años.
Esta hipótesis presentada, y expuesta, es debida,
no cabe duda, a alguien que no estuvo presente en el pasado; sin embargo, llama
la atención por lo interesante que resulta, aunque difícil de constatar, sí
posible de sospechar en un futuro. Si tal como parece puede haber
ocurrido, no deja de sorprender el desconocimiento del tiempo transcurrido
entre el enfriamiento del núcleo marciano y el aspecto deshabitado que reina en
su superficie. Y es precisamente ese precioso tiempo, como previsión, el que
necesita la especie humana para desarrollar una tecnología capaz de frenar,
tanto el enfriamiento del núcleo terrestre como la pérdida del campo magnético
terrestre.
Es casi imposible concebir algo nuevo, desde el
punto de vista tecnológico, sin que se pague por ello, incluso es inviable; sin
embargo, diariamente se anuncian diseños cada vez más baratos que nunca llegan
a ver la luz.
Esta teoría no simplifica la murga diaria de los
gases y regüeldos emitidos por la especie humana, sin olvidarnos de los
animales, ya que al no entenderse muy bien, lo más sencillo es hacer propaganda
y echar mano de lo más cercano, comprensible, y machacante, tal que el cambio
climático atípico se debe al escape de gases hacia el espacio, sin más.
Últimamente, aparte de las famosas emisiones de
dióxido de carbono (CO2) se mencionan otras emisiones guardadas en la recámara,
para ser utilizadas en su momento, sin dar mucha publicidad e importancia,
porque afecta de lleno a la industria del automóvil movida por energía que, en
su combustión, desprende dióxido de nitrógeno (NO2), gran contaminante, que
aumenta con el tráfico rodado, aunque fluctúa, según las casas fabricantes y no
digamos según qué regiones.
Ambas teorías: el efecto gaseoso y el enfriamiento
del núcleo planetario, aparte de que, entre ellas, falta el nexo, ¿son
comprensibles y compatibles?, porque lo fácil es continuar echando la culpa a
los gases de siempre, y por todos conocidos. Así que de gases, en términos
absolutos, nada, y de ley natural terráquea, lo que toque en esta época, y a
vivir con ello. Reiterar que todo es cíclico nunca viene mal, pues al mismo
tiempo que el océano glaciar Ártico se descongela el océano glaciar
Antártico aumenta su superficie helada.
Sí se debe tranquilizar a quienes se ponen tan nerviosos y tratan de poner al resto de la Humanidad ante algo imprevisible, aunque claro, como es que el planeta Tierra, en breve, se desconoce si habrá o no un calentamiento/enfriamiento. Todo lo que vaya en contra de la evolución natural planetaria fracasará, debido a que paulatinamente/progresivamente va adaptándose más rápido de lo que el humano pretende ser. La prepotencia humana se demuestra cuando se trata de colocar, como se hace, parche tras parche, en vez de investigar sobre las leyes del planeta. Al final, todo ello son como cortinas políticas de humo que venden a cambio de no implicarse en el final de las guerras, la hambruna.
Sí se debe tranquilizar a quienes se ponen tan nerviosos y tratan de poner al resto de la Humanidad ante algo imprevisible, aunque claro, como es que el planeta Tierra, en breve, se desconoce si habrá o no un calentamiento/enfriamiento. Todo lo que vaya en contra de la evolución natural planetaria fracasará, debido a que paulatinamente/progresivamente va adaptándose más rápido de lo que el humano pretende ser. La prepotencia humana se demuestra cuando se trata de colocar, como se hace, parche tras parche, en vez de investigar sobre las leyes del planeta. Al final, todo ello son como cortinas políticas de humo que venden a cambio de no implicarse en el final de las guerras, la hambruna.
Alfonso Campuzano
Sigue a @AIf0ns0
No hay comentarios:
Publicar un comentario