jueves, 27 de septiembre de 2018

PROPINA vs ECONOMÍA VARIABLE

La propina debería ser un gesto de agradecimiento, pero nunca jamás una imposición, casi empresarial, que supliera defectos pecuniarios y mantuviera una economía sumergida dirigida hacia la corrupción – Alfonso Campuzano

La propina para un español, dada la consecución de un sueldo mínimo interprofesional, es un agradecimiento muy particular a un servicio muy concreto, porque se supone que todo profesional ejerce lo mejor posible, y sin esperar nada a cambio como muestra de gratitud.


Y conviene recordar que la propina está arraigada en unas profesiones más que en otras, incluso en algunas es inconcebible como que, en ciertos países, lo consideran tal oprobio que inician una persecución hasta conseguir devolverla.


Es cierto que antes de los años ochenta había oficios, quizá por falta de regulación adecuada, como por ejemplo la hostelería, en que las familias vivían casi exclusivamente de las propinas, mientras que hoy día no tanto, salvo como algo  meramente extraordinario, y sin ser fundamental, a lo que nadie hace ascos, porque para eso está presente el sueldo mensual.


Sin embargo, traspasando la frontera española, en los oficios que no han conseguido un sueldo mínimo interprofesional medianamente digno, la propina trata de suplir los defectos, es decir, estipula una imposición con cargo al cliente, que no a la empresa, avalada por..., lo que supone un tanto por ciento más en la factura final de la consumición, muchísimas veces en desacuerdo con tal cantidad.


Tales propinas, si se piensa con detenimiento, no están al corriente con el correspondiente ministerio de Hacienda, lo que significa cruda y llanamente dinero black, da igual que sea poco, o muchos pocos, porque a la larga, se quiera reconocer o no, entran en el terreno resbaladizo de la corrupción.


Tanto se critica al reino de España por muchas cosas, quizá demasiadas, pero no precisamente por las propinas. Sin embargo, sí se mantienen obligatoriamente en casi todos los países europeos y americanos tal dinero negro generado, que compensa y, sobre todo, protege una economía sumergida.


Da lo mismo que sea un país primermundista que tercermundista, porque la exigencia es similar en cuanto uno se ausenta de España, con pelaje de turista, ya sea por vacaciones en cruceros, a playas, a visitar monumentos, o bien por motivos estrictamente laborales.


Otra cosa es la política que, sin ser reconocida como profesión, sus protagonistas pretenden que lo sea, agrandando los vicios intrínsecos que tiene la propina, es decir, añadir al sueldo una serie inacabada de beneficios, que no cotizan al ministerio de Hacienda y, menos aún, a la Seguridad Social, lo cual se traduce institucionalmente en dinero opaco e insolidario, encaminado hacia la corrupción.


He aquí la exposición de una serie de propinas, con o sin crisis, a las que tienen acceso Sus Señorías, y que no disfrutan las demás profesiones:
Asistentes personales, tan criticado a los funcionarios militares, tanto oficiales como jefes, en época dictatorial, hasta conseguir hacerlos desaparecer, aunque resucitados en la actual partitocracia;
Complementos remunerarios varios;
Cuotas mensuales gratis de los teléfonos celulares con wifi y de los fijos con fibra;
Alojamientos, sobre todo en hoteles de cinco estrellas, gran lujo, cuyo ejemplo más sangrante ha sido el de un diputado catalán, en un hotel madrileño situado frente al Congreso de los Diputados, en suite reservada con nombre propio durante 24 años, aunque utilizada aproximadamente 72 días al año.
Chóferes particulares;
Comidas de trabajo en restaurantes de postín;
Comisiones de duración interminable;
Computadoras y teléfonos celulares personales de última generación;
Despachos injustificables;
Dietas de todo tipo y condición;
Indemnizaciones postcargo público, que nunca jamás recibe un funcionario con plaza fija por oposición;
Pago de desplazamientos en taxi, kilometraje de automóvil propio; 
Pensiones estratosféricas, muy por encima de la máxima de los trabajadores que han cotizado toda su larga vida laboral;
Portavocías parlamentarias;
Secretarías;
Subvenciones estatales por grupo parlamentario;
Subvenciones por diputado;
Tarjetas de crédito personales;
Viajes, en clase de business, por tierra, mar y aire;
Vehículos del parque móvil, que tanto se censuró a oficiales y jefes militares, en época dictatorial, hasta hacerlos desaparecer.
Unas propinas que no cotizan lo que debieran, y que son pagadas con los impuestos de los exprimidos señores contribuyentes.

ALFONSO CAMPUZANO
         
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jueves, 20 de septiembre de 2018

RECICLA QUE ALGO QUEDA

El reciclado de residuos orgánicos e inorgánicos, desde siempre, ha sido una necesidad socio-sanitaria indispensable que ha evolucionado hasta convertirse en una industria – Alfonso Campuzano

Todos los ayuntamientos están obligados a recoger y reciclar los residuos en plantas adecuadas de tratamiento y eliminación. Por esta razón, las familias deben ceder graciosamente, a modo de gratis total, esta materia prima, sea orgánica o inorgánica, sin recibir a cambio un desembolso de las empresas de explotación privada.

                     Selección de residuos alimenticios para hacer compost y ser vendido
¿En qué partida presupuestaria consistorial se pueden leer los beneficios conseguidos por los ciudadanos en su ayuda al reciclado?

                 Empaquetado de papel y cartón  dispuesto ser vendido
En general los ciudadanos no tienen por qué conocer el circuito que emplean tales empresas ni siquiera conocer si hay libro de entregas, tanto de entradas como de salidas, incluso albaranes o recibos, mediante cuadrantes contables con el debe y el haber, en cuanto al transporte empleado.

                    Vidrio multicolor antes de sr seleccionado para ser vendido
Sorprende más aún que no se hable con diafanidad de esta labor socio-sanitaria, lo que indica cierta turbiedad, pues es casi imposible de creer que estas empresas privadas, y sus intermediarias, trabajen sin ánimo de lucro, cuando reciben subvenciones que salen de las tasas e impuestos.

                    Diferentes plásticos almacenados antes de ser vendidos
El Ayuntamiento de Valladolid, un suponer, dispone de una planta de reciclaje privada denominada Centro de Tratamiento de Residuos Urbanos, que anualmente mantiene con casi medio millón de euros pagado por los contribuyentes. O sea, el reciclaje de los multiresiduos supone un gasto para el ciudadano en lugar de ser un beneficio para él.

               Restos de calzado y material textil almacenados para ser vendidos
Dado que se sabe, por estudios más o menos recientes, que de un total de más de veintidós millones de toneladas, un ciudadano español genera más de media tonelada de materia prima residual al año de muy diversa condición.

                     Aceite vegetal para ser vendido 
Algunos ejemplos: restos alimenticios (más de 91 kilogramos por personas); cartón y papel (unos 30 kilogramos por persona); vidrio (unos 20 kilogramos/persona); plástico de procedencia animal, vegetal, sintético, éste con sus múltiples variedades, posiblemente más de medio millón, al menos así era en los años setenta, fundamentalmente derivados del petróleo, aunque también derivados del carbón, del gas natural (unos 14 kilogramos/persona); calzado a base de cuero, espuma, fibra, goma, y ropa, material textil (unos 10 kilogramos/persona); aceite de procedencia animal, mineral, vegetal (más de 3 kilogramos/persona); metales como acero, aluminio, cobre, estaño, hierro, magnesio, níquel, plomo, zinc (más de 2 kilogramos/persona); electrodomésticos (unos 2 kilogramos/persona); medicinas (unos 100 gramos/persona); etcétera. Es decir, cada ciudadano español genera 172 kilogramos de residuos anuales.

                     Metales que serán seleccionados para ser vendidos
Una vez clasificados todos los elementos se embalan para ser vendidos a otras empresas, nunca regalados, cuyo dinero resultante debería ingresar en las arcas municipales, momento en que sería pertinente, reducir los impuestos y tasas municipales, pues no se puede entender que reciclar sea un negocio sólo para ciertas empresas y un gasto para los contribuyentes.

                     Electrodomésticos antes de seleccionar las piezas que serán vendidas
Nuestros antepasados recientes, es decir, abuelos y padres, ya reciclaban lo más sencillo, por lo que recibían un módico  beneficio, aunque no supieran emplear esta palabra, en referencia a papel y cartón, así como al vidrio, incluso metales, porque lo restante, incluido lo alimenticio iban a parar al fuego de la cocina bilbaína.

                  Restos de medicinas
Sin embargo, los partidos políticos y las centrales sindicales, ya en el actual estado de partitocracia, generadora de nepotracia, que no democracia, ante tanta desidia como vertedero ilegal, se apropiaron de la idea en beneficio de empresas recicladoras.
Por ello, sería loable que cada familia exigiera lo que le corresponda por esos teóricos 172 kilogramos/persona/año de residuos aportados para que más de 10.000 empresas públicas, con gerencia privada, subvencionadas con dinero de los contribuyentes, sin recibir nada a cambio, ni siquiera una rebaja de los impuestos, no continúen haciendo patrimonio a costa de los contribuyentes.

ALFONSO CAMPUZANO
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lunes, 10 de septiembre de 2018

CARROCERÍA DE CICLISTA

Los ciclistas deberían ser visibles mediante potentes luces de situación e intermitentes, delanteras y traseras, diurnas y nocturnas, ropa y casco reflectantes, además de circular en fila de a uno – Alfonso Campuzano

Convendría que se pusiera coto a la sangría de accidentes viales, tanto profesionales como aficionados, tanto en ciudad como en carretera, mediante un análisis pormenorizado y serio, sobre el método de circulación empleado por los ciclistas, para mejorar la visibilidad del desplazamiento a pedales mediante un esfuerzo físico personal.
En principio, se supone que los propios ciclistas están capacitados para cuidarse a sí mismos. Sin embargo, para que los demás les cuiden y les mimen, deberían seguir las normas establecidas para circulación de cualquier vehículo de dos (motocicleta) o más ruedas (coche, camión) y ser cuanto más brillantes, mejor para conservar sus vidas.
Sin olvidar que la estabilidad de las dos ruedas de una bicicleta depende del esfuerzo físico que propulsan los miembros inferiores del ciclista, además de realizar quiebros insospechados, siempre es menor que la que proporciona una motocicleta impulsada por un motor.
No resulta suficientemente eficaz pretender que se endurezcan las penas por atropello a ciclistas, fundamentalmente en carretera; no es suficientemente eficaz invertir en la ampliación de los carriles-bici existentes –la percepción es de que son vías de circulación prácticamente vacías, la mayor parte de las veinticuatro horas al día–, y que tanto dinero cuesta al contribuyente.
Sin embargo, dado que las bicicletas no son sólo para el verano, sino para todo el año, los ciclistas deberían cooperar, además de respaldar las normas de tráfico vigentes, tanto en zonas urbanas como interurbanas; deberían circular obligatoriamente, y sin excepción, en fila de a uno, nunca jamás en grupo.
Las bicicletas deberían hacerse más visibles, pues su carrocería es el propio ciclista, ya que se las ve poco o nada, mediante potentes luces de situación e intermitentes, tanto en zona delantera como trasera, tanto diurnas como nocturnas.
Las bicicletas deberían ir provistas obligatoriamente de señal acústica, léase timbre, que brilla por su ausencia, con que adviertan de su presencia cercana, sobre todo al asustadizo y distraído peatón, cuando circulan incomprensiblemente por las aceras de las calles a velocidad endiablada.
Los ciclistas deberían portar ropa y casco reflectantes, tanto de día como de noche.
Los ciclistas deberían circular atentos a todo lo que ocurre a su alrededor, y nunca jamás distraídos, mientras juegan o leen noticias en el teléfono celular.

ALFONSO CAMPUZANO
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